Reconócelo: has empezado la cuenta atrás para las vacaciones de Semana Santa y, en secreto, también cuentas ya los días que faltan para el verano… ¡Tus clientas también! En este momento en que todas tenemos el sol, la playa y la arena en nuestras cabezas, comienza también el pánico de cada año, más conocido como “operación bikini”. ¡Estoy blanca como un muerto! ¿De dónde ha salido ese michelín? ¿Qué hago con la piel de naranja? ¡Relax! Las vacaciones están para disfrutar y tú debes trasladar esa tranquilidad a tus clientas: todo tiene solución… ¡con un tratamiento de Skeyndor! A continuación, algunos consejos para venderlos mejor.
A veces, los tratamientos en cabina pueden parecer caros, sobre todo si los comparamos con el precio de una sencilla crema… ¡Pero los resultados son inigualables! Por eso, debes recordar a tu clienta que, como ocurre con ese famoso detergente para platos, merece la pena invertir un poco para conseguir mucho más. ¡Lo notarán desde la primera sesión! Especialmente si realizas primero un diagnóstico corporal para saber qué partes debes atacar con más ímpetu en tu masaje en cabina...
De hecho, una de las claves para la eficacia de los tratamientos en cabina, además de las manos profesionales que realizan la cura, es la personalización. En los centros Skeyndor sabemos que cada cuerpo y cada piel son diferentes y por eso adaptamos las rutinas a las peculiaridades de nuestras clientas. Se realizan diagnósticos corporales para localizar las zonas más conflictivas y poder centrar los esfuerzos en ellas, optimizando el tratamiento para conseguir resultados visibles más rápidamente.
La mejor forma de animar a tus clientas para que continúen su tratamiento, sesión tras sesión, son esos resultados visibles. Pero un pequeño premio o recompensa no estará de más… Crea un programa de fidelización y ofrece un descuento en los productos para continuar el tratamiento en casa, una vez finalizado, si han cumplido el 100% de las sesiones previstas. O marca una pauta para que, cada vez que acudan a su cita, se lleven una muestra de producto diferente, idealmente adaptado a sus necesidades (quién sabe si, así, acaban descubriendo su crema ideal y la compran en el futuro…¡Éxito 2x1!).
Es cierto que con las clientas de siempre, a las que conoces bien, es más fácil acertar (con o sin premios de fidelidad), ¿pero qué hay de las clientas potenciales que cada día pasan por delante de tu centro? La campaña corporal previa a las vacaciones de Semana Santa es una época PERFECTA para captar el interés de nuevas clientas… Atráelas a tu centro con una “Semana de diagnóstico gratis” por ejemplo, si quieres conocer nuestra nueva dinámica de diagnóstico, anímate a asistir a nuestros nuevos cursos en Skeyndor Academy.
Tal vez no todas salgan con un tratamiento de 6 sesiones bajo su brazo, pero sí quieran llevarse algún producto de la línea Body Sculpt adaptado a sus necesidades específicas para probar… O intenta con una “Semana de la concienciación solar” para promocionar la línea Sun Expertise y los productos antiaging que combaten los efectos de la exposición prolongada año tras año, según veas la preocupación por la que ha entrado esa nueva clienta potencial a tu centro.
En la era de las Redes Sociales, no te limites a captar la atención de los transeúntes: lanza mensajes en tu Facebook, Twitter, Instagram… Y usa tu Base de Datos (de acuerdo con la nueva ley de protección de datos) para recordar a tus clientas esporádicas que es la época del año perfecta para hacerte una nueva visita… Intenta personalizar al máximo tu mensaje, sobre todo si las contactas a través de un medio que puede ser directo como Whatsapp: ¿es una clienta que vino por una preocupación facial o corporal? ¿Se ha hecho algún tratamiento en cabina o sólo compra productos? ¿Ha sido o se acerca su cumpleaños en breve?
Recuerda, la clave es mimar a tus clientas, tratarlas de manera profesional y sobre todo personalizada para que se sientan únicas. Porque su necesidades lo son y la forma de conseguir que vuelvan y estén satisfechas es reconocer sus peculiaridades y tratarlas según ellas. ¡Feliz campaña corporal 2019!